Guía definitiva de depilación

Desde los comienzos de la civilización hemos luchado por quitarnos los vellos corporales. En las cuevas prehistóricas se encontraron afiladas piedras que hacían las veces de cuchilla de afeitar, aunque fueron los egipcios y posteriormente los griegos los que impusieron la moda del no-vello. Entre las clases pudientes de estos últimos existía la costumbre de depilarse totalmente, incluso los genitales como sinónimo de buen gusto. Y esa costumbre ha llegado hasta nuestros días: las mujeres deben, como mínimo, acabar con el de las piernas y los hombres empiezan a quitárselo de espalda, torso y también piernas

1. Luz pulsada 

También llamada IPL (por sus siglas en inglés) consiste en disparos de luz que son absorbidos por la melanina y como el pelo, al ser oscuro, tiene más que el resto de la piel, va a parar ahí y se convierte en calor que va destruyendo la raíz del mismo hasta que este desaparece. 

A tener en cuenta. Si empiezas, tienes que ser constante para notar los resultados y que tu inversión realmente valga la pena.

El tratamiento se realiza bastante rápido y no resulta doloroso, atrás quedaron las quemaduras que en ocasiones provocaban las primeras máquinas.

Sesiones necesarias. Dependerá mucho de la zona a depilar y del tipo de vello. Muchas personas consiguen eliminarlo con seis sesiones en seis meses. Y después un mantenimiento de una o dos veces al año. 

2. Depilación láser

Es parecido al anterior, es una luz que tiene un solo color y una sola frecuencia, por lo que resulta más fácil de absorber, tiene diferentes máquinas dependiendo del tipo de vello y de piel.
Debes realizarlo en una clínica especializada o en un dermatólgo. Este es un tratamiento muy rápido en el tiempo y más duradero y sirve para cualquier tipo de piel, siempre que se lleve a cabo con el instrumental adecuado.

Este método es más doloroso (sobre todo en zonas sensibles como las ingles o las axilas) y además las sesiones resultan más largas. Y resulta bastante más caro que el anterior. Se necesitan entre 6 y 8, con una diferencia de un mes o 45 días entre una y otra. De todas formas, depende de cada persona. 

3. Depilación eléctrica

Este consiste en introducir una pequeña aguja que llegue hasta el folículo piloso y entonces dar una pequeña descarga eléctrica que acabe con él. El especialista retirará la aguja y sacará el vello (que no dolerá, pues no se tratará de una extracción). Al acabar, se desinfecta la zona para evitar infecciones o irritaciones. 

No se puede realizar si tienes psoriasis o padeces de varices, es mejor que no emplees este método de depilación. 

Es muy efectivo y sirve para cualquier tipo de piel. No es necesario que el vello sea grueso ni de un color específico, no se recomienda para grandes superficies como la piernas ya que ir pelo a pelo, no se recomienda para grandes superficies, como las piernas. En cambio, es muy útil en otras más pequeñas, como por ejemplo para los de alrededor del pezón, el vello facial o incluso para hombres que lo tengan localizado en la espalda.

No he probado ninguno de estos métodos, pero me gustaría probar la luz pulsada para eliminar los vellos, espero que les sirva. Paola Stefania